MC JONA. El guerrero sencillo

Con talento, mensaje y consecuencia batalla tranquilo por los escenarios nacionales. Viajero innato y trabajador, hoy se establece como un referente del dancehall chileno. Ha compartido escenario con grandes artistas y canta con estilo variado, partiendo por el roots, pasando por el hip hop, llegando al dancehall y el reggaetón. Con la misma pasión entona algún bailable o un clásico de sonido antiguo. Las bandas Cultivo de Jah y África Cósmica lo acompañaban en esos días y marcaron su camino musical.

A fines de Septiembre compartimos una tarde de buena conversa, para saber del ayer, hoy y mañana de este artista, nacido en Santiago y porteño por derecho propio. Valparaíso presenció su nacimiento musical junto al de toda una escena en el 2000. Ahora se prepara para mostrar su trabajo en el exterior con un disco promocional y se encuentra pensando en el segundo disco.

Dato: Unconquered People de Israel Vibration es su disco de Reggae preferido.

¿Qué importancia le asignas a tus padres en tu desarrollo como músico y persona?
Total. Es lo fundamental porque me dejaron ser libre para que tomara mis decisiones. No tengo nada que decir porque fue un apoyo a todo mi desorden y mi curiosidad en lo musical y lo espiritual. Mi hermano era músico, tocaba guitarra; mi papa igual, pero eran aficionados. Primero escogí ser Rasta y después vino la música, lo que debe haber sido raro para ellos porque no pesqué la música por ellos sino porque el Señor apareció en mi camino. Ellos me apoyaron, me dieron todo el aguante, aceptaron que dejara de trabajar y me viniera a vivir solo a Valparaíso. Hasta el día de hoy me ayudan en lo que se puede y si no hubiera contado con ese apoyo hoy no estaría aquí.

Te llevaron a estudiar una carrera.
Si, estudié mecánica de aviones. Me gusta harto esa profesión, trabajé en eso y aprendí a respetar el oficio. Esa carrera tenía buenas proyecciones porque te pagaban, te iban a buscar a la casa, te daban pasajes, comida. Todo súper bueno y me gustaba, pero después fue mucho conocer a Rasta, y dejé todo. Mis padres comprendieron.
Has estado bastante en Valparaíso, Santiago y Concepción.
¿Qué destacarías de cada una de ellas?
Valparaíso me produce una nostalgia y le tengo un amor muy grande, es cómodo estar acá, es familiar, es como estar en el patio de la casa. De Conce me gusta sentir el clima crudo, el frío, el viento sureño, hay que tener cuero de chancho. Y de Santiago, me gusta la energía de la gente que se las arregla para vivir ahí y con ese ritmo. Hay gente que llega a las doce de la noche y se levantan a las cinco de la mañana, está ahí todos los días dándole… No soy crítico de ese estilo de vida, pero me llama la atención, una energía muy embalada.
¿Cuáles consideras los hitos de tu carrera artística?
Lo primero fue el año ’97 cuando estaba en el colegio. Todavía no tocaba música y conocí a los Gondwana. Eso fue lo que más me marcó, los vi en una parte de La Serena y hueviaba a mi papa “…vamos a ver a los Gondwana, sí son buenos, me gustan. No, quién conoce a Gondwana. No, sí son buenos, vamos, vamos…“, y fuimos. Entonces estuvimos con ellos, Don Chico a pie pela’o fumando Chalice y toda la onda, hicimos buenas migas y me gustó mucho su vibra, me marcó y dije, eso es lo mío.
Después por el 2000 conocer a los hermanos de Valpo y trabajar en la música. Nadie era músico entonces se trataba de aprender de a poco, empecé en la batería. Toda mi carrera como músico la hice con Cultivo de Jah. Ese es el máximo logro: cómo seis personas sin saber de música conformaron un grupo para hacer reggae.
Luego pasaron hartas cosas, pero dejar plasmado en disco ciertos trabajos después del proyecto África Cósmica que le tengo mucho cariño, vibro mucho con ese proyecto. Fuimos a Perú con Kilakeo y grabamos Informativo Popular que era nuestra descarga contra la mierda del sistema que queríamos decir una vez por todas. Los discos son los hijos de uno porque deja la palabra plasmada.
A propósito de eso ¿cómo ves el disco “Ponle Oreja” ahora que ha pasado tiempo ya?”
El Ponle Oreja me abrió muchas puertas. Me salí de los esquemas y logré mostrar todo lo que hice anteriormente en un solo disco. Con eso mostré lo que soy yo. Puedo hacer un tema InformaZion que es una base con Marcus Garvey hablando, y no sabes lo que está pasando, pero luego la gente asocia porque en otros discos también aparece su voz, algo tiene con Marcus Garvey. Luego vienen unos reggae, unos temas de Cultivo de Jah antiguo, unos temas románticos, un hiphop… Eso fue lo que me gustó, que fue variado y demostrar lo que puedo hacer. Además el Pato V. lo dejó sonando con un sonido terrible y dónde se ponga suena bien.

Entonces se podría decir que tienes una visión garveyista del reggae.
Sí, total. Es un trabajo, por eso acomoda tanto el Livity Rasta a lo que uno hace, porque el desgaste es mayor. Estás vivo de día pero también tienes que estar vivo en la noche. Llevando las dos cosas, debes tener un livity (o forma de vida) ordenado, cuidar tu cuerpo y tu mente y entrenarte, cosas que son bien garveyistas. Sino no podría estar dónde estoy ni podría estar recibiendo la bendición del Señor cómo la recibo. Me cuido, soy ordenado y hago lo que tengo que hacer y mi trabajo prospera, sino te estancas.
Garveyista total, además las personas que me rodearon en tiempos más críticos en que necesitaba cosas, tenían una visión garveyista, más que preocuparse tanto por la espiritualidad veían el trabajo, hay que trabajar y trabajar. Eso me marcó y así pude llevar adelante la idea de hacer un montón de cosas distintas.

¿Cómo caracterizarías los últimos dos años en la escena Reggae Nacional?
La otra vez comentaba si se habían fijado en la cantidad de cantantes de dancehall que hay solamente en Valparaíso. Yo partí en el 2000 y estaba yo y quizás uno que otro más, pero a lo que ha llegado la evolución que ahora hay diez quince que van, tocan… Imagínate a nivel global hay una demanda en el negocio increíble. Eso se torna para bien y para mal. Gracias al Señor me ha ayudado bastante que se masifique y que la escena crezca. Porque así la gente puede escuchar a otros cantantes y comparar y así van escogiendo quién les gusta, quién suena mejor y quién tiene mejor letra. Eso le da una gama de posibilidades a la gente. La escena ha crecido más del 100%.

Paralelo al oficio de los cantantes está el de las producciones ¿encuentras que ha madurado el trabajo de las productoras?
Todavía se deja mucho de lado al artista. En las producciones grandes, nada. Es malo el trato para los artistas nacionales. Dónde he ido no ha sido cómo uno espera realmente. Hay excepciones dónde todo resulta bien y hay respeto, sobre todo con las productoras pequeñas que están haciendo un gran esfuerzo. Pero este es un negocio y las productoras grandes la ven por las lucas y lo último que quieren es pagar, como para que la cosa parta de un nivel bueno. Por eso siempre hay quejas de que sonó mal o que a estos se les hizo tal cosa o que a estos se les construyó un escenario afuera… Cosas que le suceden a los artistas chilenos porque las productoras se preocupan por los de afuera y no por los de acá. La productora tiene que dar la base del movimiento para que no sea una moda.

Nos puedes contar de las experiencias One Love y Reggae Por La Vida.
El Reggae Por la Vida se hace hace caleta de años y es sólo a beneficio, eso es como trabajar con la familia, están involucrados mis viejos y caleta de amigos. Lo destacable es que son los que menos tienen y mejor nos tratan, con cariño con respeto. No es una cosa de plata sino de química, de onda. Nunca hemos tenido problemas y esas tocatas suelen ser productivas tanto en lo material como lo espiritual porque enriquecen mucho, se mezclan la música con gente que da su testimonio, por eso ha perdurado y han participado grupos como Quique Neira, Gondwana, Sinergia, Saiko, etc. Con la OneLove ha habido dos experiencias que a mí en lo personal me han ayudado mucho a darme a conocer a gente de afuera como una artista local de buena calidad. Lo fome es que a veces tiene que venir gente de afuera a reconocer y decir este artista es bueno para que la gente de acá lo reconozca también, pero así pasa.

Ya que has tenido contacto con artistas internacionales como Cultura Profética o Kafu Banton, ¿qué país está más cerca de Chile en lo musical, Puerto Rico o Panamá?
Yo creo que Chile absorbe muy bien las culturas y de forma rápida. Por el fenómeno musical del momento diría que estamos más cerca de Panamá más que de Puerto Rico porque el acercamiento es por Cultura Profética y en cambio en Panamá es el estilo que está pegando, el Dancehall. El Reggae no está en su boom en este momento aunque si hay mucha gente que le gusta. Por eso digo que Chile absorbe muy bien las culturas porque tiene gustos muy variados.

¿Cuáles son los proyectos a futuro?
Quiero sacar el promocional ahora porque son los temas que ya estoy tocando. Esta semana me meto a grabar de nuevo. Hoy va todo muy rápido y si no sacas temas… con lo de internet y además todos tienen su HomeStudio en la casa. Tengo varias cosas para el futuro cómo grabar mi nuevo disco, colaborar en el disco del Boomer y conformar una banda como proyecto aparte.

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¡Mucho respeto y mucho amor!
por Felipe Voigt